Me encontraba en el concierto de Joshua Bells, por más de 1 hora estuve escuchando la música más bella que jamás había oído. El concierto a cuatro cuerdas de Vivaldi, el ave María, y todos entonados en ese violín, el nombre me es gracioso, Stradivarius. Suena como un juego de palabras, como un hombre viejo que aun vive, pero no puede ser murió hace 200 años, pero eso no importa.
Al terminar de escuchar ese bellísimo sonido me dispuse a continuar con mi camino.
Y caminando por las calles de esta fría ciudad, vi un terrible accidente, una limosina negra se estampo con un trailer que llevaba cigarros.
Como pude me acerque para prestar primeros Auxilios, logre liberar a tiempo al conductor del trailer, también libere al conductor de la limosina, pero ambos ya habían fallecido.
Pero al liberar a los pasajeros de atrás, lo vi, Era aquel tipo que poco antes había dado el concierto, como pude lo saque de ese accidente, y al verse tan mal herido, logro decir sus ultima palabras,
-Toma el violín y huye con él, si no lo haces caerá en el museo, y fue hecho para ser tocado, aprende a tocarlo y se el mejor.
Y así murió, tome el Stradivarius y comencé a tocarlo, Mas cerca OH Dios de ti, y así inicié mi travesía por este mundo de la música.
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